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Si hoy pudiera darte un consejo como empresaria sería: “descubre tu valor”. Mi experiencia me ha permitido comprender que sólo cuando te valoras a tí mismo y reconoces la importancia de lo que haces, desbloqueas tu poder interior.

Y liberar ese poder, liberar todas tus capacidades sin restricción es una enorme oportunidad para lograr tus objetivos o los de tu empresa. Ese poder es el que permite que muchos emprendedores puedan creer en sus ideas y esforzarse por llevarlas a obtener resultados.

Porque si yo existo, me valoro y los demás me ven haciéndolo, ¿qué va a pasar? Pues me valoran también. Y si yo tengo un producto o servicio que quiero vender y que tiene que ver conmigo y con mi esencia, pues los demás van a querer conectar conmigo.

Y si ese valor propio se convierte en algo genuino y transparente, no pasa desapercibido. Hay mucha gente que no va bien en sus negocios o en diferentes áreas de su vida y dicen “es que es como si yo no existiera”, “como que la gente no me ve, me ignora”.

Entonces, vamos a ver cómo vive su existencia y cuáles son sus rutinas y esas personas no se ven a sí mismas.

También ahí, es muy interesante poder analizar y conectar con esas realidades: ¿Cuál es la noción que tienes de lo que has logrado, de lo que ofreces?

Descubre tu Valor: Desbloqueando tu Mentalidad Exitosa

Incluso, en el plano profesional o laboral, es común escuchar a personas que llevan 7 meses, un año, dos o tres, hablando de sus proyectos como algo más pequeño de lo que son. Y desde ahí empieza a fallar el tema del autoreconocerse.

Cuando hablamos de una idea, de un proyecto o, por ejemplo, emprendimiento, hablamos de algo que apenas se está desarrollando. Pero, si ya tenemos el producto de ese proceso, no podemos reducirlo; y eso es lo que pasa cuando no lo vemos en la dimensión que es.

Tanto así que, por ejemplo en los emprendimientos, desde el momento en que tenemos un producto que un cliente compra: hay empresa. Y eso es un gran paso para creernos que somos exitosos.

Así que, debe empezar por nosotros mismos creer que estamos lográndolo. Pasar de la idea de que “lo estoy intentando” a la certeza del “lo estoy haciendo realidad”.

Si te quedas haciendo el esfuerzo, intentando que se dé como crees que debe ser, pues ahí no ves los resultados. Necesitas superar esa etapa y empezar a poner atención a lo que haces y produces para tí y para tu vida.

Entonces, ¿cuáles son las claves para desbloquear tu mentalidad exitosa y obtener resultados?

Y la respuesta no se aleja del reconocimiento y el valor. Y si hoy con esta información empiezas a revisarlo, te vas a dar cuenta que simplemente se trata de hacerlo consciente, de poder verlo, de conectar con papá, con mamá y aceptar todo como fue.

Esto lo que permite es dar pasos avanzados porque si te ves, si te valoras, si sientes la aceptación de todo como fue y conectas contigo, encuentras la clave del éxito y obtienes aquello por lo que has luchado mucho.

Tu Empresa Refleja tu Identidad Personal

Nunca está de más preguntarte: ¿Tu emprendimiento o empresa responden a lo que tú eres?

Esto nos conduce a un tema de mentalidad donde lo que sea que pase con nosotros y aunque no tenga lugar en la empresa, sí la puede impactar.

Y vienen las inquietudes acerca de si es la misma empresa la que debe resolver y si es la empresa la que debe cargar con eso de nosotros.

Los sistemas empresariales, se enfrentan a lo que traemos emocionalmente, lo que genera un efecto o impacto no solo en el desempeño, sino también en las relaciones con todas las personas con las que estamos conectados en función de la labor.

Entonces, cuando uno empieza a conocer los sistemas, eso contribuye a lo que llamamos el ambiente o el clima organizacional; y de alguna manera empieza a convertirse en un modo de estar o de ser parte de la misma empresa.

Y si yo estoy a la cabeza, pues con mayor razón ese estado ha permeado. Y pienso que en las empresas pasa como en las familias. Por ejemplo en los niños, no se trata de que ellos generen comportamientos difíciles, se trata de lo que no se hacen cargo los padres.

Así que, es en el momento en que los padres empiezan a decidir hacerse cargo de lo que les pasa, incluso cuando todavía no lo han resuelto, que el niño queda libre de esa atadura para jugar y aprender. Y ahí se hacen cargo.

En las organizaciones es igual, en la medida en que quien es el emprendedor o empresario toma la decisión de hacerse cargo de lo que sucede con él y empieza a dar pasos para resolverlo.

Aquí es cuando las empresas se liberan de esa carga personal, emocional y pueden seguir fluyendo y funcionando.

Valor y Liderazgo: El Motor del Éxito Empresarial

En una empresa, cuando tenemos la figura de quien está a cargo o quien ejerce el rol de liderazgo, asumimos la responsabilidad de garantizar que esté en orden, que haya control y dirección.

Pero, cuando eso no se está cumpliendo, se generan vacíos que son autocompletados como no debería ser.

Esto ocurre especialmente cuando el líder no se hace cargo y finalmente esto es responsabilidad de los directivos, pues el hacerse cargo hace parte de la conexión con nosotros mismos y en relación a eso que les apasiona y que los alinea con sus talentos.

Este tema de cómo entrar en conexión con lo que llamamos “mi misión” o “mi propósito”, lo que presenta es todo un cambio de paradigma.

Y lo veo en las empresas también desde el tema de la visión. Como muestra de esto, las empresas y las multinacionales, hoy en día están buscando más gente conectada con ellas mismas y con lo que quieren y persiguen.

Ante estas situaciones, lo primero que tendríamos que hacer es enfocarnos un poco más en encontrar quiénes somos, qué queremos, para qué somos buenos y para qué estamos aquí.

Consiste en una exploración un poco más al interior. Y luego, sí podremos dedicar tiempo, dinero y recursos a desarrollar un emprendimiento o dirigir una empresa.

Esa es la razón por la que la vida nos enfrenta y nos requiere. Necesitamos tomar decisiones en nuestros negocios y, muchas veces, perdemos el sentido y no sabemos qué hacer.

Suele haber demasiada presión por tener varias alternativas; y cuando todo llega en el mismo momento, perdemos la sensación de estar seguros. Y aquí es donde hace la diferencia tener definido lo que somos y a lo que estamos dispuestos.

Descubre tu Valor: Rumbo al Éxito y la Realización Personal

Sólo cuando encontramos lo que somos, estamos seguros y podemos dedicar primero tiempo a nosotros, y luego, en consecuencia, dedicar tiempo, recursos, energías y dinero, en crear y pulir eso que queremos lograr con nuestro emprendimiento o empresa.

Se trata entonces de dar un salto al vacío, de confiar y dedicarse a construir con mucha fuerza, aunque eso signifique empezar de cero, y hacerlo superando cualquier decisión.

Y esa es la clave. Cuando llegamos aquí, ya no estamos dispuestos a dejar la vida en el trabajo, ni a sacrificarnos en él por alcanzar el éxito financiero.

Ese cambio de paradigma, es la oportunidad de darle la vuelta y poner el dinero a trabajar para nosotros y darnos el valor propio que merecemos. Esto es lo que nos lleva a ser realmente felices y exitosos.

Por: Mónica Paérez T.
Psicóloga y consultora sistémica

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